4.13.2009

De cuando era feliz

Sí, ya mucho, muuucho tiempo sin escribir; me perdí, pero ya estoy volviendo. ¿Que qué me hizo volver al sendero del bien? mi Myspace, se me ocurrió abrirlo después de no sé cuántos años luz y me acordé de quién era hace poco más de un año. Leí lo que había escrito ahí y me puse triste al ver que poco queda de lo que fui en aquel momento, cuando decidí abrir una cuenta en Myspace por un mono con el que quería y al que naturalmente nunca le iba  a hablar...larga historia, el punto es que sólo cuando se está triste se valora lo feliz que se fue en otros momentos. Lo bueno es que empiezo a recuperar mi felicidad, poco a poco, tal vez muy lento y aunque aún hay momentos en que me dejo caer de nuevo, ahí voy. También me puse triste porque me di cuenta de lo superficial que me puedo volver, o algo así, porque cuando leí lo que había escrito juro que daria lo que fuera por ocupar mi cabeza de nuevo en ese tipo de cosas y no en vanalidades como en las que la ocupo ahora. Anyway, el punto es que he decidio volver a ser quien era en aquellos momentos, ya aprendí que nadie me va a sacar del hoyo en el que estoy más que yo; escribir siempre me ha funcionado para desahogarme y hoy estuve pensando que muchos de nosotros lo único que queremos es expresarnos, so...

11.05.2008

¿Por qué?

Ando chipil y es uno de esos días en que me pregunto por qué es tan difícil ser feliz, vivir sin preocupaciones. A ratos me acuerdo de los momentos en que más feliz he sido y creo que lo que los distingue es eso: la ausencia de preocupaciones.
Suena medio exagerado y a cliché, pero tal vez sea eso que llaman "parte de ser adulto", no que yo tenga los años y sea toda una crecidota, pero creo que está más que claro que conforme vas creciendo aumentan tus preocupaciones. Hay que preocuparse por las consecuencias de los actos o las consecuencias de los no-actos (o de no actuar pa' que me entiendan), preocuparse por el trabajo o la escuela, preocuparse por el tiempo, preocuparse por los demás, preocuparse por uno mismo, preocuparse por la crisis económica...¡en fin! ¿Hay algo de lo que no debamos preocuparnos?
Como diría la canción de Coldplay: "Nobody said it was easy, no one ever said it would be so hard" y vaya que es difícil. 
Luego escucho canciones que me gustan mucho y que la mayoría de las veces pueden hacer mi día, aunque no en días como hoy, y me pregunto por qué la vida no puede ser como una de esas canciones que pueden hacerte creer que realmente todo es perfecto, canciones que son como un mundo aparte donde, en efecto, no hay preocupaciones, si acaso la de decir lo que sientes.
¿Por qué es tan difícil estar tranquilo sin un solo cargo de consciencia? ¿Por qué es tan difícil dejar ir las cosas? y ¿Por qué es tan difícil ser feliz?

9.14.2008

De vuelta...

Y heme aquí de regreso en mi bella ciudad. Podría decir que mi regreso es meramente físico porque mi cabeza se quedó en algún punto entre Montreal y el D.F. desde la madrugada del 13 de septiembre en que veía pasar todo demasiado rápido en medio de la neblina con sentimientos encontrados de la emoción de ver a mi familia y amigos y de no querer dejar atrás la vida tan cómoda a la que ya me había acostumbrado (hasta me pegó la canción de los scorpions que venía oyendo el taxista) hasta el momento en que el avión aterrizaba y yo seguía con el coraje de haber tenido que dejar tres frascos de mermelada, uno de crema de miel y todos mis instrumentos de cuidado personal en el aeropuerto, además del estrés de haber creído que ya había perdido mi pasaporte.
Con estas peripecias, después de cinco horas de vuelo, de las cuales pasé el 80% dormida obviamente, llegué. Se abrieron las puertas y vi a mis papás y seguía ida. Fuimos a almorzar y seguía ida; y, para no hacer el cuento más largo, sigo ida. Salgo a la calle y siento que deben pasar cosas las cuales no pasan, hoy en la madrugada abrí los ojos y me sorprendí al no ver la ventana del cuarto que ya estaba acostumbrada a ver cada que me despertaba.
No sé ni siquiera qué escribir, pero siento que tengo que hacerlo. De cualquier manera estoy intentando hacer las cosas que hago normalmente para ver si así empieza a girar la piedra dentro de mi cabeza, ni siquiera me nace hablar.
Tal vez necesite socializar un poco más, mientras tanto, heme aquí de vuelta a mi bella ciudad.

9.06.2008

Hacía la recta final

A estas alturas naturalmente ya perdí la cuenta y orden de los eventos, o por lo menos los de esta semana, les puedo contar que la semana pasada fui a la Biblioteca Nacional, primermundista como ella sola, en la infraestructura no es nada del otro mundo, sí está muy bonita, pero no muy grande, lo que me gustó fue la colección, tiene una sección infantil con libros en 8 idiomas y libros para los papás, tiene un laboratorio de idiomas, los archivos nacionales y en el último piso tiene películas, series y discos; además, nunca había visto una biblioteca con tanta gente, por ahí de las 10 de la mañana ya hay bastantes que se van a leer el periódico o a buscar cualquier otra cosa.
Al día siguiente fui al Museo de Bellas Artes a ver una exposición de un movimiento creado acá que se llamó automatismo, en lo escrito era muy parecido al dadaísmo y en lo visual es totalmente abstracto, de lo cual no soy muy fanática, pero este me gustó mucho.
El jueves estuvo brutal porque fuimos al Oratorio Saint-Joseph, este de aquí abajito:
bonito como él solo, pero la subida sí está medio pesada, pero lo vale al 100%. El interior es bastante simple, lo que mas resalta es el órgano, unas figuras talladas en madera de los apóstoles y representaciones talladas en piedra del viacrucis. Por cierto, si se fijan en la foto, hay tres "hileras" de escaleras, las blancas son de madera y están hechas sólo para los que suben de rodillas.
Pero cuando pensábamos que esa subida era cansada, llegamos al mirador de Mont-Royal, que está del otro lado del parque donde se ponen los hippies:
Esta semana tuvimos el lunes libre porque es el día del trabajo y, como es costumbre, nadie trabaja jojo. Nos fuimos a caminar por Mont-Royal, y la Main, fuimos por un helado por el que yo moría, después fuimos a un restaurante bastante famoso que se llama Schwarpp's (o algo así) donde venden carne ahumada, clásico restaurante de mala muerte en el que hay filas de gente de todo tipo esperando mesa, si hasta Bono y la Celine lo han visitado eh? 
En los días subsecuentes fuimos a la catedral Marie Reine-du-Monde, que se construyo con la intención de hacer una versión reducida de la Basílica de San Pedro, está re-bonita oyes! les muestro la foto de afuera:
Adentro tiene un baldaquín (qué tal eh?!) que también es "imitación" del que está en Roma, todo lo demás ni siquiera puedo describirlo, está completamente hermoso; además de que yo no sé por qué, pero siempre he tenido cierta atracción hacia las iglesias.
También les cuento que el viernes pasado era la última clase con la maestra que me daba la materia de música y películas así que se le ocurrió que hiciéramos una representación de alguna canción en francés por equipos, la de nosotras fue un problema totalmente y terminamos cantando una de Edith Piaf, yo moría de la pena naturalmente, pero resultó bastante nice, porque luego todos cantaban con nosotras.
Esta semana fue la última clase de mi otra clase (valga la redundancia!), la de francés a través de Montreal, y como prueba final nos tocó hacer un "folleto" turístico y llevar a un grupo a un tour que nosotros organizáramos, a mi nada más me tocaron dos escuinclas: una japonesa (que como buena taka taka se impresionaba de todo, pero era buena ondita) y otra mexicana (medio tonta, por cierto...ya me voy a enroscar, perdón) y las llevé al Palacio de Justicia, a la Catedral y a la Plaza de Armas.
Hoy fui a Ottawa, visitamos el Parlamento y yo me sentía como en la mera Inglaterra, oyes!
Si por afuera está impresionante, por adentro está lo que le sigue, la biblioteca está hermosa, además de que fue lo único que sobrevivió de un incendio que hubo por ahí de...ya no me acuerdo qué año, está completamente hecha de madera. Lo demás es estilo gótico y eso sí yo no sé qué hay más si banderas de Canadá o estatuas de la reina Victoria.
También visitamos el Museo de la Civilización en el que más bien nos metimos a la parte infantil que era como tipo La ciudad de los niños, te dan tu pasaporte y tiene que completar lo sellos que te pide. También visité una sala de arte canadiense el cual me gustó mucho, en su mayoría eran figuras talladas en piedra o madera.
Después de eso nuestros pies ya no respondían así que nos sentamos durante la última media hora que nos quedaba.
Llegamos a Montreal como a las 8 y en estos momentos me encuentro en casa esperando a que den las mil de la noche porque Lucette nos pidió que la acompañáramos a recoger a una nueva residente, que ocupará el lugar de la alemana que se fue hoy, al aeropuerto, pero llega hasta las doce; y mañana llega otra monita...brasileña creo, pero nosotras mañana partimos a Quebec así que la conoceremos hasta el lunes que nos toque enseñarle cómo irse a la escuela, tal como la alemana nos enseñó cuando llegamos...c'est bizarre!
Esta semana todo mundo regresó a clases y al trabajo así que está medio loquito todo, hay días en que el ambiente en la calle se siente tenso, si de por sí la gente maneja la indiferencia totalmente, ahora más! el metro en las mañanas es una locura, porque aparte cambiaron el sistemas de tipos de pasaje y la gente como que todavía no le acaba de agarrar la onda así que las filas son interminables y luego se descomponen los aparatos y bue!
Loquita  y todo la ciudad me encanta, en realidad ya me empezaba acoplar después de mis dos primeras semanas de confusión, estrés y nostalgia, sólo que ahora más bien toca regresar, de lo cual no me quejo, pero siempre que dejo algún lugar del cual disfruto mucho me queda una sensación muy rara, es como cierta nostalgia de ya no ser parte de la vida de la que fui parte durante un mes y, sin embargo, sé que las cosas van a seguir totalmente normales.
En fin, a pesar de que podría quedarme a vivir aquí y regresaría un millón de veces, creo que por el momento ha sido suficiente y quedo satisfecha.
xoxo

8.25.2008

Le weekend

Hoy no hicimos gran cosa. En la mañana fuimos a la colonia St. Henri que es una colonia obrera, sí se nota mucho la diferencia entre esa colonia y todo lo demás que habíamos visitado, pero no deja de estar curiosa. Fuimos porque en la clase la maestra nos puso a investigar sobre algunos personajes y lo que tenían en común era esta colonia, algunos nacidos ahí, otros que había escrito sobre la vida de los habitantes, y después nos dio a elegir algunos lugares curiosos de la zona, nosotras escogimos la estatua de este monito, se llamaba Louis Cyr y era el hombre más fuerte de Canadá, él era policía de la zona y luego se volvió luchador, y he aquí su estatua:
Acá abajo una foto de una casa toda vieja, no sé si la foto me quedó chueca o así estaba la casa, creo que más bien la primera opción:
También escogimos esta estación de bomberos que tiene figuras en bajo relieve de ladrones y policías, bueno sólo son como 4 jaja, pero el edifico está muy mono, todo viejito y estas cosas están en la parte de atrás:
Este es un edificio que me encontré y me gustó, es de oficinas solamente:
Y también queríamos ver unos liensos de un chino, creo, que de hecho usaron para ilustrar el libro de un hombre que se llama Gabrielle Roy que escribió un libro sobre la vida en esta colonia, pero ya no encontramos el lugar y se nos hizo un poco tarde.
En la tarde fuimos a comprar los boletos para Oasis y Ryan Adams (yiei!!) y más bien nos regresamos a la casa porque ya faltaba llegar un día temprano, sobre todo cuando Marina tenía que pedirle  Lucette que lavara su ropa jojo, total que llegamos y a Lucette más bien ya le da igual vernos, porque nunca nos ve. 
Le contaba a mi hermano que como que luego no le hace mucha gracia eso de que lleguemos tan tarde todos los días, no dice nada, pero pues se nota no? más que nada y menos que todo. Yo no me consterno porque sé que de todas maneras no hay mucho que pueda hacer, de todas maneras le avisamos qué vamos a hacer, pero ni siquiera es como que nos vayamos de fiesta y lleguemos a las 3 de la mañana es sólo que nos la pasamos todo el día paseando y luego los autobuses, como mencionaba, cada vez pasan menos así que todo es proporcional y llegamos medio tarde. No cabe duda que cada quien sus costumbres.
La alemana me cae muy bien, pero, como diría Marina, ya me agarró casi que de big sis, quiere que vayamos con ella a todos lados, lo cual pues no es posible, no? básicamente y luego ya hasta penita me da decirle que no. El otro día me vio en la compu y le dije que si algún día la necesitaba me la pidiera y hoy, en efecto, me agarró la palabra, pero más bien se emocionó y luego ya quería que le enseñara fotos de México y ella enseñarme sus fotos, que está muy padre, digo estoy bastante consciente de que si algo está padre de estos viajes de estudiantes es la cantidad de gente que conoces y todo lo que puedes aprender de ellas, pero cuando uno anda intentando hacer sus cosas pues ya no es tan agradable.
El clima anda medio raro, el fin de semana hizo un calor de los mil demonios y hoy hizo frío, bueno viento frío, de todas maneras aquí la gente anda como si estuviéramos a 30º. Si hay algo que me gusta es que la predicción del clima de acá es bastante atinada; por ejemplo, antier vimos que ayer iba a llover y no llovió hasta por ahí de las 9 de la noche, pero llovió, de hecho nos empapamos porque andábamos en un parque.
Ah sí! ayer en la mañana regresamos a Mont-Royal que, además de ser el monte de la ciudad (no por nada Mont-réal no?) que en realidad no está ni siquiera más alto que el Chiuihuite yo creo (ya había dicho eso?), es el lugar de reunión de todos los hippies del mundo, Coyoacán se queda corto, acá desde la esquina ya huele a mota (porque aquí sí es legal fumar mota, pero no venderla duh!), llegas y está el sonido de los tambores por todos lados, gente bailando, otros tirados en el pasto, hay puestos con aretitos y esas cosas y, por si fuera poco, entre todos esos hippies te encuentras a gente corriendo y andando en bici, en mi vida había visto ese contraste, pero en fin.
Después fuimos a un restaurante tibetano el cual me gustó mucho. Comí unas cosas que se llaman momos, que es pan hervido relleno de algo, los míos tenían verduras, pero hay de carne y queso, y también te venden el puro pan hervido, bastante bueno y el lugar estaba bien tranquilo, hasta el mesero hablaba bajito, de hecho el hermano de mi amigo se desesperó de tanto silencio jaja.
De ahí nos fuimos a un parque que se llama Jean-Drapeau (Juan-Bandera) donde cada domingo está el Piknic Elektronic, un dj diferente cada fin, un puesto de cerveza y crepas (bonita combinación) y gente bieeen viajada bailando a todo lo que da, eso sí, hasta bebés hay. A mi perrita le gustaría mucho, la música está bastante chida y hay una vista muy padre del puerto (ver 1a foto), eso sí rete-harto gay y según mi amigo ahí los que no tienen playera son gays porque así ligan, se me hace un parámetro medio arbitrario, pero cada quien sus costumbres. Por cierto, algo que he notado es que por muy gays o drogados nadie se mete con nadie, cada quien anda en su onda y ni pelan. Aquí fue donde nos agarró el súper aguacero y más bien nos tuvimos que echar a correr al metro, cuando llegamos dejó de llover... 
En esa isla también está Six Flags, pero ahí no pienso ir.
Bueno, creo que esto es lo más relevante. Siento mucho no poder escribir tan seguido como quisiera, pero como les decía llego bastante tarde y pues ya ni ganas; mi perrita ya me pasó unos tips de todas maneras y tal vez mejore la situación. Después les muestro algunos videos también.
xoxo

8.24.2008

A una semana...

Pues hasta ahora la rutina de entre semana va así:
Me levanto a las 6 de la mañana, los primeros dos días era Marina quien se levantaba primero, pero nos conviene más al revés. Me arreglo, tiendo mi cama, bajo a hacerme mi lunz y salimos justo a tiempo para agarrar el autobus de las 7:52 o algo así. Llegando al metro agarro el periódico, el Métro, que es lo mismo que el Publimetro, y me lo voy leyendo en el camino hasta que llego a la escuela porque luego llegamos antes de que empiecen las clases. Saliendo de la escuela vamos con un amigo que tenía en México, pero se vino a vivir acá y que nos ha funcionado bastante bien como guía turística. Ya de ahí nos echamos a caminar a donde sea durante toda la tarde. Hemos estado llegando a la casa por ahí de las 12 de la noche, porque deben de saber que conforme avanza el día cada vez hay menos camiones así que casi siempre nos toca el de las 11:22 y de ahí son como otros 20 minutos a la casa.
Es horrible que nuestra casa esté tan lejos porque nos echamos mínimo una hora a todos lados, aunque ya más bien nos echamos nuestras buenas siestas en el metro que es donde más nos tardamos. Lo que también odio es que los camiones tengan horarios porque para estarle atinando está cañón, nada como las filas interminables de micros en México, hasta de dónde escoger jaja.
Admiro mucho lo organizada que es esta ciudad, de repente se pasan de ordenaditos, pero está bien. Ya les había contado que odiaba como nadie te sostiene la puerta cuando sale adelante de ti, pero mi amigo me estaba contando que es como pura consecuencia del feminismo, de hecho aquí sí te dan cuentas separadas y en todos lados te preguntan si quieres que te cobren todo junto o separado, lo cual está bastante pro, también te multan si te cruzas la calle a la mitad lo cual me parece más que maravilloso porque si de algo me quejo en México es de los peatones que se avientan donde se les da la gana, y hoy me enteré de que los picos que tienen las escaleras eléctricas del metro entre ellas es para que a ningún menso se le ocurra echarse de resbaladilla y darse en la mother y luego querer demandar al gobierno.
También estoy maravillada con lo segura que es la ciudad, acá las escuinclas andan en shortsitos en el metro a la hora que se les da la gana y ni quien les diga nada! Nosotras también andamos, como he mencionado, a altas horas de la noche en el metro o caminando y no pasa...nada!. Cuando sales del antro, a las 3 de la mañana que apagan la música (literal) sales y la calle atascada de adolescentes corrompidos por el alcohol, pero muy tranquilos y muchos policías cuidando que nada pase.
Ya tendré más oportunidad de detallar todo esto porque  estas horas ya no me gira la piedra mucho, por el momento les puedo decir que Montréal es lo de hoy.

8.19.2008

Abrumancia

Vista desde Mont-Royal
Iglesia en Vieux-Montréal
Atardecer desde la calle donde vivo
Bueno, por dónde empezar...
El domingo me desperté por ahí de las 10 de la mañana bajo el grito de Vaaaleriiiie al estilo la tía consentida (chiste local) que me avisaba que ya se iba, de todas maneras yo tenía que quedarme para esperar a que llegara Marina, me volví a despertar por ahí de las once me arreglé, desayuné, estuve charlando con la alemana, Andrea (siento decepcionarlos, pero es menor de edad), me volví a dormir y cuando desperté ya había regresado Lucette y estaba súper estresada porque Marina no llegaba, total se volvió a ir y yo salí a leer y 'ora sí que a tomar el sol porque estaba bien padre el día. Por fin llegó Marina y nos fuimos con Andrea a que nos enseñara cómo llegar a la escuela; después fuimos a un parque que se llama Mont-Royal, que, ayer me enteré, es como el monte más importante de Quebec, no sé por qué si hasta el cerro del Chiquihuite está más alto, pero bueno. En dicho parque todos los domingos hay gente tocando percusiones y otros bailando, medio coyoacanesco, pero está muy padre y ese domingo había un como festival de algo latino, pensábamos que era de México, porque vimos a una sra. haciendo tortillas, pero alguien nos dijo que era dominicano...¡en fin! 
Ayer: el primer día de escuela, sólo fue un examencillo ahí básico, nos dieron una plática de orientación para que supiéramos quién era quién en la escuela y luego jugamos bingo para "conocernos más", mientras te pasaban para que escogieras tus clases.
¡Mis clases! estoy re-contenta, ahorita tomo dos: una se llama Français à travers Montréal y la otra es de películas y música. En la primera te llevan a diferentes lugares para que convivas con la gente de aquí. Hoy fuimos al Palais de Justice a ver juicios, estuve increíble, me sentía como en una película, vi como 4 juicios criminales y medio civil, obviamente le entendía a un quinto de lo que decían, pero sí pude agarrar una que otra cosa, sé que vi a un ratero que era periodista, vi a otro que tenía como mil ocho mil robos, otro mono que había violado su libertad condicional y lo mandaron a un grupo de manejo de ira y...el otro no me acuerdo. Cuando vi al primero estaba pensando que siempre me había dado mucha tristeza ver esposados, sobre todo porque éste lucía bastante triste, probablemente era mentira, pero lo aparentaba, el segundo se veía bien maleante y se hacía el que obedecía todo, el tercero tenía tooooda la facha de criminal, hasta risa me dió porque se veía bieeen loquito, y el cuarto...¡el cuarto era un panzón!
En fin, en la tarde fuimos al Montreal Viejo que está súper bonito, fue un paseo de parte de la escuela, pero empezó a llover y tuvimos que ver todo súper rápido así que planeamos regresar el sábado porque de verdad está re-padre.
Hoy nos echamos toda la Av. St. Catherine que es dónde está la escuela y, para nuestra desgracia o fortuna, todas las tiendas, pero encontramos unas muy padres.
Y, sí, en efecto, Lucette nos tiene en engorda. Creían que con ver los 3 refris y la alacena era suficiente? pues no! Lo peor es llegar a casa y ver 2 platones de pasta, uno de ejotes, uno de pollo en salsa de jitomate, dos panes de plátano, entre otras cosas y con la sra. esperando a que te embutas por lo menos 1 plato de c/u!! Ya no sabemos cómo decirle que no! y ella sólo nos dice que comemos muy poquito y que hace falta comer más para estar saludables. Cometimos el error de decirle que nos había gustado una salsa picante que tenía por ahí que le trajeron de Tony Roma's porque fue y compró dos botes como de 1 litro de salsa, sólo que esta es china y pica el doble! De verdad no tienen idea de cómo prepara y prepara comida, está muy buena onda de su parte, pero todo tiene un límite. 
Luego la sra. que le ayuda con la limpieza, Anita, está bieeen rara, habla súper bajito y dice mil cosas a las que luego ni les entiendes, pero si le agarras la onda está chido platicar con ella porque viene como de mil nacionalidades diferentes y estuvo en la guerra y así.
Amo Montreal, está muy loca la ciudad y ves gente de mil partes del mundo, cuando voy en el camión de regreso de repente me siento medio abrumada porque luego ya no sabes ni quién es quién ni quién es qué, pero me gusta. La gente es medio rara, hay unos muy amables y otros que no tanto, luego van de quítate que ahí te voy y ni dicen nada o algo que me choca es que nadie, ni por error, te detiene la puerta cuando va adelante de ti, y déjenme les digo que la mayoría de las puertas aquí son bastante pesadas. 
En fin..."breve"resúmen de estos 3 días, intentaré escribir más seguido para no hacer las entradas tan largas, pero es que sí llego medio cansada y luego tengo mucha comida que acabarme así que...entiéndanme.
xoxo